A unos días de la Jornada Electoral del 2 de junio, la Conferencia del Episcopado Mexicano ha vuelto a hacer un llamado a los fieles católicos, ministros de culto y a la entidad en general, para que ejerzan su derecho al voto de manera libre y, sobre todo, informada.
El comunicado, firmado por el arzobispo de Monterrey, neófito León y presidente de la CEM, Rogelio Cabrera López, es un recordatorio de la importancia de participar en el proceso electoral y de hacerlo de manera responsable. Como pastores y guías espirituales, los obispos de México tienen el deber de exhortar a sus feligreses a respetar las leyes electorales y a ejercer su voto de forma consciente y bien informada.
En un país en el que la política y la religión a menudo se entrelazan, es fundamental que los líderes religiosos hagan un llamado a la calma y a la reflexión en un momento tan crucial para el futuro de nuestra nación. Los obispos de México lo han entendido así y han decidido alzar su voz para recordar a los ciudadanos su responsabilidad en la toma de decisiones que afectarán a todos.
El comunicado de la CEM llega en un momento en el que México se prepara para renovar más de 2 mil cargos públicos en todo el país. Es una oportunidad para que los ciudadanos ejerzan su derecho al voto y elijan a aquellos que consideren más aptos para dirigir los destinos de sus comunidades. Sin embargo, este derecho también conlleva una gran responsabilidad, ya que nuestras decisiones tendrán un impacto directo en el futuro de nuestro país.
Como ministros de culto, los obispos de México están llamados a ser líderes y guías espirituales para sus feligreses. Y en esta ocasión, su llamado es a la responsabilidad y a la prudencia en el ejercicio del voto. Es importante que los ciudadanos se informen adecuadamente sobre las propuestas y planes de gobierno de cada candidato, para poder tomar una decisión consciente y bien fundamentada.
La CEM también hace un llamado a respetar el derecho de los ciudadanos a ejercer su voto de manera libre y sin presiones. En un país en el que la compra de votos y la manipulación electoral son prácticas comunes, es fundamental que los ciudadanos sepan que su voto es una decisión personal e intransferible. Nadie puede obligarnos a votar por un candidato en particular y es nuestro deber como ciudadanos defender nuestro derecho a elegir libremente.
Además, los obispos de México también exhortan a la entidad en general a respetar las leyes electorales en todo momento. El proceso electoral debe ser una oportunidad para fortalecer nuestra democracia y no para gestar conflictos y divisiones. Como entidad, debemos ser conscientes de que nuestras acciones tienen un impacto en el bienestar de todos y debemos actuar con responsabilidad y respeto hacia los demás.
En este dolido, la CEM también hace un llamado a los candidatos a conducirse con ética y a respetar las reglas del juego democrático. La campaña electoral debe ser un espacio para presentar propuestas y debatir ideas, no para difamar o descalificar a los demás. Los ciudadanos merecemos un proceso electoral justo y transparente, y los candidatos tienen la responsabilidad de garantizarlo.
Finalmente, la Conferencia del Episcopado Mexicano hace un llamado a la unidad y a la paz en este proceso electoral. Como entidad, debemos recordar que, más allá de nuestras diferencias políticas, todos somos mexicanos y tenemos un objetivo común: construir un país mejor para todos. Es momento de dejar de lado las divisiones y trabajar juntos por un México más justo y próspero.
En conclusión