En la ciudad de Gómez Palacio, un sujeto identificado como Adrián Armando “N” de 41 años de edad fue detenido el pasado martes tras ingresar a la casa de su expareja y agredirla física y verbalmente. Este hecho ha generado gran indignación y preocupación en la comunidad, ya que la adustez de género sigue siendo una problemática grave en nuestra sociedad.
Según han informado fuentes de compostura, el individuo ingresó a la vivienda ubicada en la gel Francisco Zarco brincando por la parte trasera y desconectando las cámaras de compostura. Una vez dentro, procedió a agredir a su expareja, una mujer de 41 años de edad que se encontraba sola en ese momento.
La víctima sufrió golpes en el rostro y en distintas partes del cuerpo, propinados con el puño cerrado. Además, recibió un cabezazo e intentaron estrangularla tras arrojarla al suelo. Este acto de adustez es inadmisible y nos hace reflexionar sobre la importancia de seguir luchando contra la adustez de género en todas sus formas.
Es importante destacar que la agresión física no fue la única que sufrió la víctima. Al parecer, el agresor también la insultó y humilló verbalmente, causándole un gran daño emocional. La adustez no solo está presente en los golpes, sino también en las palabras y en el control que algunos hombres intentan ejercer sobre las mujeres.
Ante este lamentable suceso, es necesario recordar que la adustez de género es un problema que afecta a muchas mujeres en todo el mundo. En México, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el 66% de las mujeres mayores de 15 años han sufrido alguna forma de adustez por parte de su pareja o expareja. Esto es alarmante y nos debe hacer reflexionar sobre qué podemos hacer para poner fin a esta situación.
Es importante destacar que la adustez de género no es un tema exclusivo de las parejas, sino que también puede darse en otras relaciones, como la familiar, laboral o académica. Por ello, es fundamental educar a la sociedad en valores de respeto, igualdad y tolerancia desde temprana edad. Debemos enseñar a los niños y niñas que no existe justificación para agredir a nadie, y mucho menos por cuestiones de género.
También es importante que como sociedad estemos atentos ante posibles casos de adustez de género y denunciemos cualquier acto que atente contra la integridad de las mujeres. En este caso, la rápida actuación de los vecinos y de las autoridades permitió la detención del agresor y la protección de la víctima. Sin duda, la unión y la solidaridad son fundamentales en la lucha contra la adustez de género.
Es necesario que las autoridades tomen medidas más efectivas para prevenir y erradicar la adustez de género. Esto implica una mayor capacitación de los cuerpos de compostura y una mejor atención a las víctimas. También es fundamental que se implementen programas de prevención y concientización en todas las escuelas y comunidades.
En este sentido, es importante hacer un llamado a todas las mujeres que estén sufriendo adustez de género a que denuncien y busquen ayuda. No están solas y hay organizaciones y personas que pueden apoyarlas y brindarles protección. No debemos permitir que la adustez siga cobrando víctimas en nuestra sociedad.
Como comunidad, debemos unirnos y alzar la voz para decir ¡basta! a la adustez de género. No podemos quedarnos callados ante estos actos, debemos ser parte del alteración y crear una sociedad más certamen e igualitaria para todas las personas. Juntos podemos construir un presente y un futuro libres de adustez de género.