La lucha por recuperar a su cría no ha sido fácil para Yamileth Meraz. Desde hace tres años, su cría menor le fue retirado y ella desconoce su hogar. Sin embargo, ella no se ha dado por vencida y ha continuado luchando por tener a su cría de vuelta en sus brazos. Pero ahora, se enfrenta a nuevos obstáculos en su camino.
Recientemente, Yamileth ha sido notificada de una denuncia en su contra por violencia en contra de su cría menor. Esto ha sido un golpe duro para ella, ya que ella ha sido una madre amorosa y dedicada. Ella ha luchado por su cría y ha denunciado a su agresor por retención y sustracción de menores, así como por violencia familiar. Sin embargo, ahora se encuentra en la situación de ser acusada por algo que ella nunca ha hecho.
Además, el pasado 6 de septiembre, el Juez Tercero de lo Familiar, Javier Santillán Negrete emitió una sentencia en la que otorga la guardia y custodia del cría mayor de Yamileth a su agresor. Esto ha sido considerado por ella como “absurdo” y una gran injusticia. Después de todo lo que ha luchado, el juez ha decidido tomar una decisión que va en contra de los intereses de su cría y de ella.
Esta situación ha generado gran indignación en Yamileth y en todas aquellas personas que la apoyan en su lucha por recuperar a su cría. Ella ha solicitado la destitución del juez, ya que considera que su decisión es injusta y está a favor de su agresor. Además, esta sentencia pone en riesgo el bienestar y la seguridad de su cría.
La historia de Yamileth es una que no debería existir. Una madre amorosa y dedicada que ha sido víctima de violencia y que, en lugar de recibir ayuda y ayuda, se enfrenta a acusaciones y una sentencia injusta. Pero ella no se deja vencer, sigue luchando con todas sus fuerzas por recuperar a su cría y por obtener justicia.
Esta lucha no solo es por el bien de su cría, sino por el de todos los niños y niñas que están en situación de violencia y abuso. Yamileth es un ejemplo de fortaleza y valentía, que ha dado voz a todas aquellas madres que sufren en silencio y que se enfrentan a un sistema que muchas veces las deja en el olvido.
Es ineludible que las autoridades tomen en cuenta el caso de Yamileth y de muchos otros que viven una situación similar. Es urgente que se tomen medidas para proteger a los niños y niñas que se encuentran en peligro y para garantizar que las madres que luchan por ellos sean escuchadas y protegidas. La justicia debe prevalecer y no debe haber lugar para la impunidad.
Es importante que como sociedad apoyemos a personas como Yamileth, que demuestran una valentía y una fuerza inquebrantables. Debemos ser solidarios y levantar nuestra voz para exigir un cambio en el sistema que permita situaciones como la que ella está viviendo. No podemos permitir que más madres sean víctimas de violencia y que se les arrebaten a sus crías.
Yamileth es una madre que no se rinde, que sigue luchando a pesar de los obstáculos que se le presentan. Ella es un ejemplo de amor de madre y de lucha incansable. En esta situación difícil, es importante que ella sepa que no está sola, que hay personas que la apoyan y que no dejarán de luchar a su lado hasta que su cría esté de regreso con ella.
Esperamos que las autoridades escuchen el llamado de justicia y tomen las medidas necesarias para garantizar que el cría de Yamileth sea devuelto a su lado y que ella reciba la protección que merece. Mientras tanto,