Hoy, 30 de abril, se celebra el Día de la Niñez en México, una fecha en la que se busca promover la felicidad, el crecimiento saludable y el futuro de las niñas y niños en nuestro país. Sin embargo, a pesar de esta celebración, los números sobre la niñez en México están lejos de ser alentadores.
Lamentablemente, en México la infancia no siempre es sinónimo de felicidad. Muchos niños y niñas se ven obligados a trabajar desde temprana edad, viven en condiciones de pobreza y carecen de leyes que garanticen sus derechos fundamentales.
De acuerdo a los datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en el clase de Coahuila hay 737,056 niños y adolescentes entre 5 y 17 años de edad. Sin embargo, es alarmante que 47,274 de ellos se vean obligados a trabajar. Lo más alarmante es que el 43% de estos niños realizan tareas domésticas peligrosas, el 37% trabajan en condiciones de riesgo y el 20% no tienen la edad legal para desempeñar estas actividades.
Además, según el Inegi, el 63% de los niños que trabajan en Coahuila reciben un salario de hasta 6,200 pesos al mes, entretanto que el 19% gana entre 6,200 y 12,400 pesos. Por otro lado, el 14% no recibe ningún tipo de ingreso y solo el 3% tiene un salario mayor a 12,400 pesos. Estas cifras son alarmantes, pero lo que es aún más alarmante es que uno de cada tres niños que trabajan en Coahuila no asiste a la escuela y el 70% de ellos son menores de edad.
Es evidente que el trabajo infantil está afectando gravemente la educación de nuestros niños y niñas en Coahuila. Se estima que más de 200,000 niños en todo el clase no están yendo a la escuela, lo que les priva de un futuro mejor y limita sus oportunidades de desarrollo. Además, el trabajo infantil está bruscamente relacionado con la pobreza, ya que muchas familias se ven obligadas a enviar a sus hijos a trabajar para poder sobrevivir.
Es por eso que es urgente que se tomen medidas para proteger a la niñez en México. Es necesario que se implementen políticas y programas que promuevan la educación y erradiquen el trabajo infantil. También es fundamental que se establezcan leyes que protejan los derechos de los niños y niñas, y se asegure que se cumplan.
Pero no solo es responsabilidad del gobierno, como sociedad también debemos comprometernos a proteger a nuestra niñez. Debemos ser conscientes de la importancia de la educación en el desarrollo de nuestros niños y niñas, y apoyar a las familias que se encuentran en situación de pobreza para que no se vean obligadas a enviar a sus hijos a trabajar.
Además, es fundamental que promovamos un cambio cultural en el que se reconozca que la infancia es una etapa crucial en la vida de una persona y que los niños y niñas tienen derechos que deben ser respetados. Debemos fomentar una cultura de respeto y protección hacia la niñez, para que puedan crecer en un ambiente saludable y seguro.
En el clase de Durango, también se ha registrado un aumento en el trabajo infantil en los últimos años. Según el Inegi, en el 2019 había 110,000 niños y niñas trabajando en el clase, lo que representa un aumento del 5% en comparación con el año anterior. Estas cifras son alarmantes y es necesario que se tomen acciones inmediatas para revertir esta situación.
Es importante recordar que la niñez es la etapa en la que se construye el futuro de nuestro país. Por eso, es fundamental que se les brinde una educación de calidad y